Intermedio: Amor limpio

¿Puedes imaginarte un amor sin celos, sin sentimiento de propiedad? ¿Un amor libre de toda la dependencia y desesperación? Vamos a probar. Podemos tomar algunos pensamientos del budismo: ¿Cómo sería un amor sin apego? ¿O abrir nuestros corazones a alguien sin otra expectativa que otro corazón abriéndose como respuesta? ¿Amar sólo por el placer de hacerlo, sin importar lo que podríamos obtener a cambio?

Imagina ver la belleza y virtudes de una persona querida y librarse de cómo sus fortalezas podrían coincidir con nuestras necesidades o cómo su belleza podría hacernos parecer mejores.

Imagina ver a la otra persona bajo la luz limpia del amor, sin enumerar las maneras en que esa persona corresponde o no la fantasía que llevamos siempre encima de nuestra pareja perfecta o amante con quien soñamos.

Imagina conocer a otra persona con la libertad y la inocencia de la infancia y jugar juntas, sin estar planeando cómo hacer que esa persona nos dé el tipo de amor que querríamos haber tenido en nuestra propia infancia.

Pero… ¿Qué pasa si abres tu corazón a alguien y no te gusta lo que sucede después? ¿Y si la persona se emborracha?, ¿y si trata tu afecto abierto con desprecio? ¿Qué pasa si la persona no hace realidad tus sueños? ¿Qué pasa si ésta es exactamente igual que la anterior? Supón que suceden todas esas cosas, ¿qué has perdido? Un poco de tiempo, una breve fantasía. Déjalo ir, aprende de ello y busca a alguien que se merezca más tu amor.

Al amor no le gusta demasiado estar embutido en moldes, que es lo que son las fantasías e imágenes de todo el mundo: planes a medida para un individuo inventado que han creado para resolver todos sus problemas. Tus autoras también tienen amantes ideales. Pero las personas no están hechas de arcilla o piedra, y no va a salir bien si te acercas a ellas con un cincel en la mano. Mira lo que le pasó a Pigmalión.

¿Cuántas veces has rechazado la posibilidad del amor por que no tenía el aspecto que tú esperabas? Quizás faltaba alguna característica que pensabas que no podía faltar o algún otro rasgo que tú nunca soñaste aceptar estaba presente. ¿Qué sucede cuando tiras a la basura tus expectativas y abres los ojos al fantástico amor que está brillando delante de ti con la mano tendida? Amor limpio: amor sin expectativas.

Limpiar tu amor no requiere una espiritualidad superior o psicoanálisis cada semana. Probablemente nunca dejarás que se vayan todos los apegos; al menos nosotras nunca hemos sido capaces. Pero quizás puedas dejarte ir un instante: tu historia, preocupaciones, inquietudes y anhelos seguirán ahí para poder regresar cuando los necesites. Pero, por ahora, mira a la estupenda persona que está enfrente tuyo.