Su nota como pareja — ¿Cuál es su valor de mercado?

Este cuestionario se ha diseñado para evaluar su puntuación en el juego del emparejamiento, esto es, en qué lugar de la escala de deseabilidad le sitúa el sexo opuesto (o aquellos que posean un circuito cerebral predeterminado opuesto al suyo). El cuestionario servirá a todo aquel que desee mejorar su nota de pareja y pasar al siguiente nivel. Le ayudará a identificar sus puntos débiles y lo que no está consiguiendo. No importa la categoría que consiga en este test, lo importante es que, si usted se siente bien en esa categoría, el resultado es bueno. Pero si no le gusta estar en esa categoría, el test le ayudará a encontrar los puntos que puede mejorar. Hemos constatado que la gente suele ser dura consigo misma, por lo que le sugerimos que rellene el cuestionario con alguien que le conozca bien y le guíe a la hora de responder con la mayor precisión posible. De este modo, además de descubrir cómo se ve usted, descubrirá también cómo le ven los demás. Mucha gente se sorprende al comparar cómo se han valorado ellos mismos y cómo les ven los demás.

Conteste las preguntas antes de ver cómo funciona el sistema de puntuación y así podrá ser más sincero consigo mismo.

Puntuación y resultados

Puntuación masculina: 46-109

Puntuación femenina: 34-77

Éste es el grupo con menor puntuación de deseabilidad. Sin embargo, este grupo tiene grandes posibilidades de mejorar su nota de pareja. ¡Sólo puede mejorar! Las personas en el rango bajo de este espectro no se preocupan demasiado de su aspecto, su estatus, su capacidad para conseguir recursos, su salud o su bienestar general.

Las personas de este grupo buscan a personas de su mismo grupo y se sentirán felices en la parcela que les ha tocado vivir. Sus parejas potenciales no ven la necesidad de que cambien y lo más probable es que ni siquiera estén leyendo este libro.

Una persona con una puntuación en la parte alta de este espectro es más probable que lea este libro y esté preparada para mejorar su puntuación, porque quiere hacer cambios en su vida.

Las personas cuya puntuación se inscribe en este grupo tienen la oportunidad de incrementar su puntuación como posible pareja mejorando los puntos donde su puntuación fue baja. Pueden hacer un cursillo, leer libros, ir al gimnasio, asistir a seminarios y cosas por el estilo. Son personas que necesitan más fe y ánimos para mejorar, pero si van atacando punto por punto, pueden encontrar el camino y mejorar.

Puntuación masculina: 110-215

Puntuación femenina: 78-150

Este grupo de personas puede tender a los altibajos. Pueden descender a la franja más baja pero también pueden esforzarse y subir rápido de nivel. En este grupo se encuentra la mayor parte de la población.

Muchos se sentirán orgullosos de encontrarse en este grupo porque las parejas más probables también estarán en esta categoría. Pasar al siguiente nivel requiere un duro esfuerzo, pero, si quieren, pueden conseguirlo. Las parejas de mejor calidad están en los niveles superiores.

Si a una persona de esta categoría no le gusta su aspecto, puede contratar a un entrenador personal, asistir a seminarios, leer libros, ir a un estilista, mejorar su salud, inscribirse en una asociación o club, participar en proyectos de grupo, hacer cursillos, contratar a un mentor o a un orientador. El trabajo invertido no sólo le revertiría en el terreno personal, sino también en el profesional con un posible incremento de sus ingresos y su éxito.

Puntuación masculina: 216-258

Puntuación femenina: 151-180

Las personas en este rango tienen confianza en sí mismas y son emprendedoras. Saben lo que quieren en la vida y suelen ir a por ello. Es muy raro que las personas de este grupo bajen de nivel, si no es a consecuencia de alguna crisis muy importante que les arrastre. Pero, aun así, no tardan demasiado en intentar volver a este nivel. Cuando alguien de este grupo tiene un problema, no necesita que se lo digan; probablemente ya estará haciendo algo para resolverlo. Son gente con recursos. Aquí es donde viven estrellas de cine, líderes mundiales, altos ejecutivos, profesionales de éxito y las parejas más deseadas.

Resumen

Independientemente del lugar que ocupe en la escala de puntuación de deseabilidad, tenga en cuenta que no es una posición fija. Usted puede mejorar su puntuación poniéndose metas para mejorar su deseabilidad y emprendiendo acciones positivas. Resultar deseable a los demás depende mucho más de su actitud, de cómo piensa y de lo que hace con su vida que de los atributos con los que nació. Si se decide, puede colocarse en casi cualquier nivel de deseabilidad y aumentar drásticamente el número de parejas de calidad que estarán disponibles para usted. Mucha gente ya está contenta con el lugar que ocupa en la escala de deseabilidad, pero no debe olvidar que sólo atraerá a posibles parejas estables con su misma puntuación. Si desea una pareja mejor, repase sus respuestas a las preguntas del cuestionario y enseguida sabrá qué debe hacer.

Cómo encontrar una gran pareja

En el año 2009, la población mundial era de 6744 millones de personas, de las cuales el 50,5% eran hombres y el 49,5%, mujeres; 3800 millones tenían una edad comprendida entre los 18 y los 60 años. Si asumimos que el 80% de esta franja de población son individuos de los países del Tercer Mundo peor parados, presidiarios, enajenados mentales o no disponibles por cualquier otro motivo, quedan 380 millones de personas normales con el sexo opuesto al suyo. Se estima que aproximadamente una de cada cincuenta personas del sexo opuesto tiene la química adecuada para usted, es decir, que hay 7,6 millones de personas que pueden hacerle suspirar a simple vista. Asumiendo que una de cada cinco personas de este grupo tiene unos valores y creencias fundamentales similares a los suyos, en alguna parte, hay al menos 1,52 millones de personas perfectas esperando conocerle.

Encontrar una pareja perfecta es como vender: es cuestión de números, y cuantos más posibles candidatos vea, más oportunidades tendrá de encontrar una ganga. Hablando de ventas, el ratio típico para un producto que se vende por $1000 es 5:4:3:2:1. Esto significa que por cada:

  • 5 posibles clientes de un vendedor
  • 4 son los que van a ver el producto
  • 3 escuchan sus explicaciones
  • 1 dice que sí.

Los mejores vendedores del mundo no dedican su vida a buscar a ese cliente que compra; van en busca de grupos de cinco posibles clientes. Usando este método «estadístico», los clientes acaban apareciendo solos. Así pues, el éxito del vendedor lo determina la frecuencia con la que se dirige a cinco nuevos posibles clientes, y no en el número de gente que compra. Lo mismo aplica en el caso de los amantes con éxito. Este tipo de personas no se sientan en casa esperando a que vayan a buscarles; son personas activas que salen a conocer a tantos candidatos como pueden. Resumiendo, debe tener una vida social lo más activa posible. Como se ha demostrado, en alguna parte del mundo, hay más de 1,52 millones de posibles candidatos perfectos para usted, pero ahora mismo no saben que existe. Tiene que encontrarlos.

Raramente encontrará a Don Adecuado o Doña Adecuada en un bar o discoteca, porque ahí es donde va la gente a buscar parejas ocasionales, y no relaciones a largo plazo.

Elija algo que le gustaría aprender, como por ejemplo submarinismo, y apúntese a un club para salir a hacer inmersiones los fines de semana. Aprenderá algo y conocerá a mucha gente nueva. Haga un curso de algo que siempre le haya interesado, pero nunca haya encontrado el momento de hacer. Podría aprender a pintar, bailar, hacer fotos o cualquier otra cosa que quiera probar. Conocerá gente con la que enseguida se llevará bien porque comparten gustos similares. De este modo, tendrá más oportunidades de encontrar personas con unos valores y creencias similares a los suyos. También hará amistades de su mismo sexo y eso puede venirle muy bien para conocer a sus amigos solteros del sexo opuesto.

Como cuando se vende algo, encontrar pareja es sólo cuestión de números.

No entre en una asociación sólo para encontrar pareja, pero tampoco limite su campo de actuación. Lo importante es que se trace un plan y se mantenga fiel a él. Cuanto más se esfuerce, más posibilidades tendrá de encontrar a su pareja ideal.

Cómo cambiar para siempre su vida sentimental

Ahora le vamos a pedir que asuma el control de su vida sentimental y que deje de consentir que las relaciones se produzcan por accidente. Lo que está a punto de leer podría cambiar su vida para siempre. ¿Alguna vez ha escrito una lista de objetivos que le pareciera que deseaba cumplir? Seguramente responderá que sí para su vida laboral, porque los negocios no pueden sobrevivir sin una lista de objetivos y planes puestos por escrito. Si alguna vez ha escrito sus objetivos, ya sabrá que el camino para alcanzarlos se materializa de pronto. Si decide comprarse un determinado tipo de coche, como un Toyota azul, por ejemplo, en cuanto decide exactamente lo que desea, comienza a ver Toyotas azules por todas partes, ¿verdad? Esto ocurre porque puede asimilar menos del 5% de lo que acontece a su alrededor, dado que de otro modo su cerebro se vería sobrepasado por un exceso de información y no daría abasto. Así pues, su cerebro busca activamente sólo la información relacionada con las cosas que tiene en mente en ese momento e ignora el resto. En cuanto usted decide hacer o lograr algo, inmediatamente comienza a ver informaciones relacionadas en los periódicos, la televisión y las revistas y escucha hablar a la gente de ello. Es como cuando ha leído el periódico y aunque juraría que lo ha leído todo alguien le pregunta: «¿Has visto el artículo sobre…?», y no es capaz de recordarlo. Entonces vuelve a mirar el periódico y encuentra una página entera dedicada al tema. Como el tema del artículo no formaba parte de su lista de prioridades, su cerebro sencillamente no lo vio.

Lo que le pedimos es que escriba una lista de las características y los atributos de su pareja ideal. No se reprima. ¿Para qué reprimirse si hay más de un millón de magníficas parejas potenciales para usted en alguna parte? También debe ser realista, ya que no tiene mucho sentido escribir que quiere a Brad Pitt o a Elle Macpherson a menos que pueda ascender al nivel que ellos desearían en su pareja. En parte, el amor evolucionó para ayudarnos a enamorarnos de alguien cuyo atractivo, inteligencia, estatus y puntuación como pareja en general sea similar a los nuestros, con el fin de ayudarnos a evitar perseguir personas inalcanzables. Le podemos prometer que independientemente de lo que escriba en su lista, inmediatamente aparecerá a su alrededor y se le acercará. Y no falla nunca.

El ejemplo de Roberto

A modo de ejemplo, ésta es la lista que Roberto, uno de nuestros lectores, escribió en uno de nuestros seminarios:

  • Alta, ojos azules y rubia
  • Atlética, esbelta y amante de hacer ejercicio
  • Con sentido del humor
  • Valiente y dispuesta a salvar barreras
  • No materialista
  • Sería una madre atenta
  • Siempre me hará sentir que soy el número uno
  • Es una puta en la cama

Ésta era la pareja perfecta para Roberto. Cuando escribió esta lista se sentía un poco incómodo con la idea, pero estaba dispuesto a probar. Siempre había escrito listas detalladas de objetivos laborales, pero nunca lo había hecho refiriéndose a una pareja a largo plazo (motivo por el cual había ido de una mala relación a otra). Más adelante confesó que en cuanto acabó de completar su lista de cualidades «perfectas» comenzó a ver mujeres que cumplían esos criterios por todas partes, exactamente como la que había descrito en la lista, y exactamente como le había pasado cuando iba a comprar el Toyota azul. Llevó la lista consigo durante más de dos años y no dejó de acudir a citas con mujeres que cumplían esos criterios. Sabemos que si aquel día no hubiera escrito esa lista, nunca hubiera encontrado la rubia de ojos azules con la que lleva seis años felizmente casado.

«Estaba en la barra de una cafetería cuando entró Fiona», nos explicó. «Cuando la vi se me detuvo el corazón y cuando habló me sentí paralizado. Saqué la lista del bolsillo. ¡Era la mujer de mi lista!». Recogió su café y se sentó en una mesa. Me acerqué a ella con el corazón en un puño y le dije: «¿Le importa si me siento con usted unos minutos? Me gustaría pedirle su opinión sobre algo». Ella me contestó: «Claro», y así empezó todo. No tenía ni idea de qué decir porque nunca antes había hecho algo como aquello. Le expliqué que había asistido a un seminario en el que nos habían pedido que escribiéramos una lista sobre cómo era nuestra pareja ideal. Le pedí su opinión sobre la lista. Afortunadamente, había cambiado la última entrada: «Es una puta en la cama» por «Es una tigresa en la cama», por si acaso conocía a la persona en cuestión y le enseñaba mi lista. Fiona se sintió sorprendida y halagada a la vez. Si no hubiese escrito la lista y no la hubiese llevado conmigo ese día, Fiona hubiera entrado en mi vida ¡y hubiera vuelto a salir de ella!

Mi madre decía que es fácil retener a un hombre… Una mujer debe ser una criada en el comedor, una cocinera en la cocina y una puta en la cama.

Jerry Hall

Si su lista dijera que lo que usted quiere es una persona pelirroja, con los ojos verdes y con rizos, eso sería lo que comenzaría a ver a su alrededor. La idea de la lista funciona. Hágala ahora y abandone el club de las «relaciones accidentales». Si conoce una pareja por accidente, no es más que eso, un accidente, un golpe de suerte, pero no deje que el azar sea su único plan de pareja.

Lo que quería Susana

Susana, otra asistente, escribió la siguiente «lista de deseos» de los atributos ideales de su pareja:

  • Alto
  • Complexión delgada
  • Cabello oscuro
  • Ojos color avellana
  • Atlético
  • Adore estar al aire libre
  • Ejecutivo
  • Le encanten los niños
  • Le gusten los animales de compañía
  • No fumador
  • Romántico
  • Ambicioso

Susana colgó esta lista en la puerta de la nevera y llevaba una copia con ella en el bolso. La repasaba a menudo. Como ocurre con la mayoría de estrategias de delimitación de objetivos, no debería limitarse a escribirla y consultarla con frecuencia, sino que también debería hablar de ella a sus amistades, que también comenzarán a ver aparecer esa persona. La técnica de la lista le ahorrará tiempo y desamores porque usted sabrá exactamente lo que anda buscando, y si alguien aparece en su vida pero no cumple las características de su lista, no perderá el tiempo esperando que esa persona cambie. Si una persona cumple, por ejemplo, el 70% de los requisitos de su lista y cree que puede pasar sin aquellos que incumple, dedique un tiempo a conocerla más a fondo. Sin embargo, si sólo posee el 20% de las cualidades que busca, olvídese de ella. Susana nos contó que, desde que escribió su lista, no deja de sorprenderla el hecho de ver hombres que cumplen esta descripción al pie de la letra, que aparecen de debajo de las piedras, en supermercados, en el gimnasio, en la televisión o cruzando un semáforo. Su cerebro está programado para buscar los rasgos de una pareja que son importantes para ella. Por eso funciona esta idea.

Su lista debe describir su mínimo de exigencias para una pareja estable. Si una pareja potencial no cumple la mayoría de los criterios que ha escrito, busque por otra parte.

Cómo jugar a los números con su lista

Graham Steele, autor de All the Best Ones Aren’t Taken, era un experto en aplicar proporciones y el juego de los números a las ventas y los negocios. Entonces quedó soltero a los cincuenta y decidió aplicar la fórmula numérica a las miles de páginas de contactos de Internet para encontrar a su pareja ideal.

Sus resultados fueron tan espectaculares que escribió un libro sobre lo que había sucedido y conoció al amor de su vida. En el año 2009 entrevistamos a Graham sobre el método empleado para aplicar el juego de los números al mercado de las parejas y esto es lo que nos contó: «Para empezar, escribí una descripción exacta del tipo de persona que buscaba. Ya había estado casado y había mantenido varias relaciones que no habían funcionado, por lo que decidí encontrar a mi pareja ideal y no conformarme con la segunda mejor opción».

Esto es lo que escribió en su lista de rasgos de la mujer ideal:

  • Edad 25-45
  • Buena presencia
  • En forma y sana
  • Cariñosa, tierna y atenta
  • No fumadora
  • Licenciada
  • Le encanta la música, intérprete
  • Buena conversadora y culta

«Después de escribir esta lista, redacté una descripción de mí mismo tratando de ser tan sincero como pude y sin exagerar en nada. A continuación elegí una buena fotografía de mí mismo y comencé a colgar los detalles en páginas de contactos de todo el mundo. La gestión de las respuestas pronto se convirtió en una ocupación casi a tiempo completo, pero si iba a obtener el resultado deseado estaba dispuesto a hacerlo. Pronto pasé a dedicar una media de sesenta horas a la semana durante cerca de tres años a subir mis detalles a la red, contestar a las respuestas recibidas y hablar con mujeres a través del ordenador. Conocí un montón de mujeres raras, algunas locas de verdad y me lo pasé muy bien».

A continuación presentamos lo que hizo Graham:

  1. Vio más de veinte mil fotografías y descripciones en páginas de contactos.
  2. Redujo la lista a unas mil fotos y descripciones completas de mujeres. La cifra supone, aproximadamente, un 5% del total de mujeres que había visto.
  3. Mandó su foto y su descripción a estas mil mujeres y obtuvo respuesta del 30% (unas trescientos).
  4. En un correo, les preguntó si les gustaría tener hijos y la mayoría, unas 285, respondieron afirmativamente.
  5. A continuación contestó a estas 285 con el «factor asesino» al constatar claramente que él no iba a tener más hijos dado que ya tenía tres. Un 60% de la lista, aproximadamente, se desentendió del tema.
  6. Este paso le dejó con unas cien mujeres con las que podía emprender una relación. La cifra representa un 10% de las mil que había considerado candidatas posibles.
  7. Estableció comunicación con cada una de estas cien mujeres para que pudieran conocerse mejor a través de chats, llamadas de teléfono y correos electrónicos. Treinta y ocho de ellas fueron a visitarle, y las relaciones o bien se estrecharon o bien terminaron.
  8. De entre esas cien mujeres, invitó a veinticuatro de países extranjeros a pasar unas vacaciones con él en Brisbane, Australia, con el trato de que ellas pagaban el viaje en avión y él pagaba todo lo demás; dieciséis aceptaron.
  9. Las que aceptaron también aceptaban la idea del sexo prematrimonial, con lo cual si surgía la química, ambos podrían evaluar el potencial del otro.
  10. Las mujeres llegaron de todas partes (incluidas las dieciséis transoceánicas), y la mayoría de ellas lo pasaron en grande. Algunas llegaron siendo vírgenes y se fueron igual («decisión mía»). Si no había química con ellas, lo consideraba una pérdida de tiempo.

«Entre todas las mujeres que conocí, Emma destacó en todos los aspectos incluso antes de conocerla personalmente. Recuerdo claramente el día que Emma se puso en contacto conmigo. Era un lunes de Pascua, había pasado ocho horas analizando mujeres en Match.com y había contestado a un centenar de ellas ese mismo día. Finalmente, tres de ellas vinieron a visitarme a Brisbane y una se acercaba mucho a mi ideal salvo por el detalle de que tendía a enfurruñarse y parecía una mujer que iba a ser difícil. Sin embargo Emma era absolutamente perfecta. En cuanto llegó a Australia sentimos la química de inmediato. Pronto nos comprometimos y nos casamos al año siguiente. Desde ese día han pasado nueve años».

Cuando Graham conoció a Emma, era un promotor inmobiliario de cincuenta años, guitarrista y cantante. Emma era una mujer china de veintinueve años licenciada en contabilidad y que encajaba perfectamente en la lista de Graham. También era guitarrista y desde entonces ha aprendido a tocar el piano. Cuando entrevistamos a Graham y Emma llevaban nueve años felizmente casados y son dos personas a las que describiríamos como perfectamente compatibles para una vida en común.

Preguntamos a Emma cómo la hacía sentir el hecho de ser el resultado de lo que algunos podrían considerar una gigantesca lotería sentimental. «Graham me eligió para convertirme en su esposa entre veinte mil otras mujeres», dijo. «¿Cuántas mujeres pueden decir lo mismo de su marido? No me cabe ninguna duda de que soy la número uno en la vida de Graham».

«Emma es la mujer que siempre quise», dijo Graham. «La mayoría de personas no tienen un número suficiente de personas entre las que elegir, y ése es el motivo por el que no pueden permitirse ser tan selectivas como lo fui yo. Es preciso poner por escrito lo que deseas y a partir de ahí basta con dejar actuar al juego de los números».

Hacer cuentas a partir de una lista da resultados. La damisela en apuros y el caballero en un blanco corcel sólo existen en los cuentos de hadas.

Graham Steele

Pese a que algunas personas pueden considerar exagerada la estrategia de Graham Steele, su ejemplo demuestra que cuando dispones de una lista de lo que quieres encontrar en una pareja y constatas con sinceridad lo que puedes ofrecer, el juego de los números funciona de un modo tan exitoso en el amor como lo hace en los negocios.

A quién debería evitar

La persona a la que usted no quiere es aquella que está desesperada por encontrar pareja o lo hace bajo presión. Este caso se daba en las generaciones pasadas de humanos y en su caso funcionaba porque su esperanza de vida era mucho más corta que la nuestra, tenían entre seis y doce hijos y debían preocuparse de la supervivencia básica, no de satisfacer las necesidades emocionales de la otra persona. Hay gente ahí fuera que quiere ser su pareja bajo la influencia de presiones externas personales, como por ejemplo para contentar a su familia. «Es una etapa de la vida», «Todos mis amigos lo hacen», «Creo que ha llegado el momento de sentar la cabeza», «No encontraré a nadie mejor», «Si no me caso, me dejará», «Este podría ser el cambio vital que estaba buscando», «Necesito tener un hijo antes de que sea demasiado tarde», etc. Seguro que ya las ha escuchado antes.

Tampoco quiere el tipo de persona débil y necesitada que se reconoce por los veinte mensajes que le deja en el contestador preguntándole dónde está, por la montaña de correos electrónicos y regalos que le manda o porque le dice que no puede vivir sin usted o que su relación es nefasta y necesitan una vía de escape. En otras palabras, debería alejarse de cualquiera que intente hacerle a usted responsable de su felicidad. Ser responsable de su propia felicidad es lo bastante complicado como para además tener que ocuparse de los problemas de los demás.

Esas personas le harán todas las promesas necesarias para convencerle de que estar con ellas es lo que a usted más le conviene. Son como la gente que compra el súper aparato de ejercicios que vieron anunciado la noche anterior en la teletienda, aunque en el fondo saben que es una pérdida de tiempo y dinero y que pronto acabará perdido bajo la cama.

Recuerde que todas las relaciones no son para siempre, y la mayoría serán simplemente divertidas y una piedra de toque para cosas mayores y mejores. Plantéese las relaciones partiendo de esta base y no busque la perfección en todas sus relaciones. Enfoque cada cita como una relación divertida a largo plazo que podría funcionar o fracasar a largo plazo.

Pistas sobre Don o Doña Error

En general, los hombres adoran el cuerpo de las mujeres en todas sus formas y tamaños, mientras que las mujeres no contemplan el cuerpo del hombre entre sus prioridades más elevadas a la hora de elegir una pareja potencial. Si alguien quiere que usted se parezca a las personas que aparecen en la portada de Glamour Magazine o Men’s Health no le querrá a largo plazo por ser como es. Este tipo de personas suelen ser gente insegura que necesitan llevar un adorno en el brazo para purgar sus propias inseguridades o su falta de autoestima. Lo importante son ellos, no usted. Sólo un pequeño porcentaje de personas puede puntuar un diez sobre diez en la escala de puntuación como pareja, y se sienten atraídas por personas con la misma puntuación. Muchos de nosotros somos imperfectos y por lo tanto nuestra pareja ideal también tiene imperfecciones. Ése es el motivo por el que nos sentimos atraídos por personas con la misma puntuación que nosotros y emprendemos con ellas relaciones a largo plazo. Si una persona tiene una puntuación como pareja de siete de diez, por ejemplo, se sentirá atraída por alguien que también sea un siete. Es posible que admiren o deseen a alguien con una puntuación de diez, pero tarde o temprano la mayoría elegirá a alguien que tenga su misma puntuación. El hecho de que la otra persona tenga defectos como nosotros hace que nos parezca más real y humana. Tras la etapa de apego, todavía le querrán más gracias a sus defectos. Así es como funciona el amor a largo plazo. Éste es el motivo por el que la misma persona que constantemente le saca defectos y siempre anda metiéndose con usted no ha entrado en la fase de apego y no es la persona adecuada para usted.

Cuando no hay buena química

Bella se apuntó a un nuevo club de tenis y conoció a gente muy divertida. Una de las grandes atracciones del club era un muchacho muy majo llamado Samuel. Era el alma de la fiesta y Bella había invertido mucho tiempo en conocerle mejor. Le pareció una persona con los pies en el suelo y descubrió que tenían muchas cosas en común. Tenían las mismas creencias filosóficas y espirituales, a ambos les gustaba llevar una vida enérgica, la comunicación entre ellos era excelente, ambos tenían mucho éxito en su carrera profesional, tenían dinero y querían tener hijos a los treinta. Además, era un muchacho al que daba gusto mirar y a Bella le encantaba su sonrisa.

Bella sabía que Samuel se sentía tan atraído por ella como ella se sentía por él, pero jamás le pidió una cita. Siempre se veían con más gente alrededor. Bella decidió que el Día de San Valentín le invitaría a salir. Lo hizo y él aceptó encantado. Bella reservó el restaurante, se compró un conjunto nuevo y estaba emocionada por haber llevado la relación al siguiente nivel.

El Día de San Valentín fue genial y la cena muy romántica. El restaurante cerraba a medianoche, pero ninguno de los dos quería que se acabara la noche. Samuel le sugirió ir a tomar el café a su casa y Bella aceptó la invitación. Cuando se sentaron en el sofá de Samuel, él la abrazó y la besó apasionadamente, pero Bella no sintió nada. No hubo química. Ninguna reacción. Fue como besar a un calamar. Bella decidió que era el momento de marcharse. Mientras conducía de vuelta a casa, se dio cuenta de que Samuel era todo lo que ella quería de un hombre, pero que simplemente no había química entre ellos. Ninguna. Estaba triste porque había pensado que Samuel sería su media naranja, pero no lo era. Siguieron siendo amigos, pero no volvieron a salir juntos.

Si la química no surge con alguien, su relación con esa persona será siempre lógica y corriente. La capacidad de crear una reacción química en la pareja es lo que sostiene la pasión y el deseo a largo plazo. Hay dos tipos de reacciones químicas: la natural y la provocada. La pasión natural se presenta cuando entran en juego los factores programados en nuestro cerebro, como la diferencia en el sistema inmunitario, las feromonas o nuestros criterios sentimentales. La pasión sostenida se produce cuando ambos integrantes de la pareja cooperan constantemente para crear un entorno propicio para que florezca la pasión.

La regla del 9%

Los psicólogos evolutivos Peter Todd de la Indiana University y Geoffrey Miller (autor de The Mating Mind) de la Universidad de Nuevo México usaron una simulación informática para determinar matemáticamente cómo una persona elige a alguien entre, por ejemplo, cien asistentes a una fiesta que pueden ser parejas potenciales. Descubrieron que en cuanto hayamos analizado nueve posibilidades de entre las cien personas de la sala, habremos decidido cuáles son nuestras aspiraciones. Esto significa que en una fiesta con cien posibles parejas, sólo tiene que examinar las primeras nueve personas que encuentre al azar antes de elegir. Examinar menos del 9% implica que no dispondrá de suficiente información para tomar una buena decisión, mientras que examinar a más personas puede hacer que le pase por alto una buena elección. Este fascinante experimento arroja un mensaje claro: si dispone de un tiempo limitado, no busque indefinidamente antes de elegir una pareja porque o bien se le acabará el tiempo o bien se quedará sin parejas potenciales. Tras examinar el 9% de los talentos disponibles, estamos listos para elegir.

Resumen

Para empezar a saber cómo es alguien realmente es necesario un año y unas cuantas buenas discusiones. Encontrar una pareja adecuada es un proceso lógico que requiere un enfoque similar al que adoptamos antes de contratar a alguien para nuestro negocio. Nunca se comprometa con nadie en las primeras etapas de una relación porque el amor le enloquece y es muy probable que quienes razonen sean sus hormonas. Tarde o temprano, las hormonas remiten y surge la verdad pura y dura sobre si una persona es o no realmente adecuada para usted. ¿No le parece más sensato realizar esta evaluación antes de que una nueva relación vaya demasiado lejos?

Es su vida y nadie es responsable de ella salvo usted. Un dicho típico reza: «El amor verdadero llegará cuando menos te lo esperes». Este viejo tópico sin duda le impedirá adoptar una postura activa en su vida sentimental, así que es mejor que prescinda de él. Escriba una lista de características mínimas exigibles a una pareja y aténgase estrictamente a ella. No se comprometa demasiado pronto con nadie y nunca se conforme con un premio menor en sus relaciones ni permita que nadie le valore como tal. Si siente que una persona tiene lo necesario para hacer que su vida sea más fácil y divertida, cultive esa relación. Si la otra persona no le imita pero todavía se siente bien, consérvela hasta que se desgaste y déjela correr. Nunca utilice a nadie como una pareja provisional «mientras llega la persona adecuada». Esta actitud provoca más dolor que placer, le impide centrarse en lo que de veras desea y es un modo de maltratar a la otra persona.

Escriba una lista detallada de las cosas que desea exactamente en una pareja ideal y a continuación actívese socialmente para conocer a tanta gente como sea posible. Aplique el juego de los números. ¿Para qué conformarse con un segundo premio si actualmente en el mundo hay 1,52 millones de parejas potenciales para usted? Sin embargo, tiene que adoptar una actitud activa y moverse entre ellas. No espere a que le descubran.

Antes de encontrar a su príncipe o princesa, deberá besar muchos sapos. Para lograr su sueño debe perseverar, y alcanzarlo precisa mucho trabajo duro. Comience ahora mismo: redacte su lista.

Mucha gente cree que, en alguna parte, le estará esperando su pareja perfecta.

La realidad es que hay más de un millón y medio de parejas perfectas esperando a cada persona.

  • Calcule su valor como pareja potencial y busque parejas con una puntuación parecida.
  • Persevere para encontrar la persona adecuada: escriba una lista y sígala a pies juntillas.
  • Si no hay química, pase página.
  • ¡No se rinda! Hay muchas personas ahí fuera que son perfectas para usted.